Postal de Berlín

13/04/2024

Los diez mandamientos

En Semana Santa la familia alemana se escapó un día a Berlín y allí fueron al museo de la RDA (que es uno de los sitios que yo tenía pensado ver la próxima vez que tenga ocasión), desde donde me mandaron una postal ilustrada con los diez mandamientos del nuevo hombre socialista.

Google Translate acude en mi auxilio para indicaros cuáles son:

  1. Debes defender siempre la solidaridad internacional de la clase trabajadora y de todos los obreros y la solidaridad inquebrantable de todos los países socialistas.
  2. Debes amar a tu patria y estar siempre dispuesto a utilizar todas tus fuerzas y capacidades para defender el poder de los trabajadores y campesinos.
  3. Debes contribuir a eliminar la explotación del hombre por el hombre.
  4. Debes hacer buenas obras por el socialismo, porque el socialismo conduce a una vida mejor para todos los trabajadores.
  5. Debes actuar con espíritu de ayuda mutua y cooperación entre camaradas en la construcción del socialismo, respetando al colectivo y prestando atención a sus críticas.
  6. Debes proteger e incrementar la propiedad pública.
  7. Debes esforzarte siempre por mejorar tu desempeño, ser frugal y consolidar la disciplina laboral socialista.
  8. Debes criar a tus hijos en el espíritu de la paz y el socialismo para que sean personas bien educadas, de carácter y físicamente fuertes.
  9. Debes vivir limpia y decentemente y respetar a tu familia.
  10. Debes ser solidario con los pueblos que luchan por la liberación nacional y con aquellos que defienden su independencia.

La misma aplicación me ayuda a ofreceros contexto con el encabezamiento de la entrada referida a este decálogo que existe en la Wikipedia en inglés:

Los Diez Mandamientos de la Moral y la Ética Socialistas (en alemán: Zehn Gebote der sozialistischen Moral und Ethik), también conocidos como Diez Mandamientos para el Nuevo Hombre Socialista (en alemán: 10 Gebote für den neuen sozialistischen Menschen), fueron proclamados por Walter Ulbricht, entonces Primer Ministro. Secretario del Partido de Unidad Socialista de Alemania (SED), en el V Congreso del Partido SED (10 de julio al 16 de julio de 1958). Basados formalmente en los Diez Mandamientos bíblicos, resumieron los deberes políticos de cada ciudadano de la República Democrática Alemana (RDA), fueron incorporados al programa del partido SED en el sexto congreso del partido SED en 1963 y permanecieron en él hasta 1976.

Efectivamente, esto es un poco como los diez mandamientos originales pero que, tomando la enuncianción marxiana aquella, aparecen por segunda vez como farsa. Leo que ya en su tiempo causaron cierta vergüenza ajena. Uno los mira y aunque no deje de estar de acuerdo con ciertas cosas la sensación que impera es la de estupor ante el moralismo infantil del poder estatal, algo que fue decayendo con el tiempo y no sólo en el bloque comunista pero que en cierta medida y con diferente objeto y medios de propaganda ha retornado en la última década.


Repetido como farsa

28/10/2021

 

No tengo idea de qué acontecimiento me impulsó a titular esta nota con la famosa frase de Marx a principios de octubre del año pasado. Me supongo que tendría algo que ver con el auge de Vox en las encuestas, pero a saber.

Lo que habíamos leído era el resumen de un trabajo académico sobre el ascenso del fascismo en Italia en los años veinte del pasado siglo que lo ponía en relación con una mayor alza previa del socialismo en zonas concretas. No era que los votantes socialistas se pasaran al fascismo, sino que la reacción en las áreas que habían experimentado mayor empuje socialista fue que los votantes de centro-derecha y derecha se pasaron al fascismo.

https://www.nber.org/papers/w27854

Our main result is that this boost to Socialist support (that is “exogenous” to the prior political leaning of the municipality) led to greater local Fascist activity as measured by local party branches and Fascist political violence (squadrismo), and to significantly larger vote share of the Fascist Party in the 1924 election. We document that the increase in the vote share of the Fascist Party was not at the expense of the Socialist Party and instead came from right-wing parties, thus supporting our interpretation that center-right and right-wing voters coalesced around the Fascist Party because of the “red scare”.

Suena lógico de por sí, pero teniendo en cuenta la selección de las variables no confío demasiado en la capacidad explicativa de los resultados. Tampoco tengo la sensación de que en España el voto a un partido específico de extrema derecha sea mayor en función de la experiencia de la izquierda que se haya tenido con anterioridad en un territorio específico, pero la capacidad de un polo para activar al contrario sí que existe (el miedo a los otros reduce la abstención). También es bastante habitual el corrimiento a una zona vecina en el eje ideológico. Eso no quiere decir que no haya quien pasa de la extrema izquierda a la extrema derecha o viceversa, pero siempre son menos que los otros. Los comentaristas tienden a creer que es un fenómeno mayor de lo que es en realidad.


Juanita la larga

07/05/2019

Edición más antigua

Hace un par de años estuve leyendo las cartas que Juan Valera escribió en Rusia y me pareció un tipo tan divertido en sus años mozos que quedé con la idea de que había que leerle la prosa que con mayores pretensiones escribió ya en la última parte de su vida y que yo meto en el saco de los «clásicos del bachillerato»: la famosa novela Pepita Jiménez y esta otra, Juanita la Larga con la que me he entretenido esta tarde de primer lunes de mayo, festivo siempre en la república irlandesa.

Llevo varias temporadas interesado en el siglo XIX español y retorno a su literatura con la sensación de haberme perdido algo en todos los años de destierro de los territorios de la lengua. Juanita la Larga muestra un mundo andaluz, rural, decimonónico y extinto. El habla estilizada de los personajes se aleja mucho del habla popular cordobesa de hoy y de entonces y no hay nada en las tribulaciones y las cuitas de los personajes oprimidos por un catolicismo asfixiante y la moral pueblerina del qué dirán que tenga que ver demasiado con el mundo en que vivo. Hay también una descripción o crítica de las condiciones desafavorables en las que históricamente ha tenido que desenvolverse la mujer. En total, nada me une con la sustancia de esta novela más allá del valor que le doy al lenguaje bello y la ventaja de compartir con el autor si no el siglo sí el segundo idioma universal. Un resumen acertado es que me merecería la pena haber leído la novela aunque sólo fuera por el descubrimiento del verbo aljofifar.

Mi fragmento favorito es la visión que el cura rural tiene del socialismo y la movilidad social:

Entonces el padre habló del socialismo, refutándolo y procurando demostrar que cada una de sus utopías es sueño y delirio insano. Según él, siempre habrá pobres y ricos, y figurándose ya la revolución social triunfante, dio por ineludible resultado que los que ahora son ricos queden pobres; que algunos de los pobres más listos y audaces se hagan ricos y que la muchedumbre de los pobres se aumente en número y padezca mayor miseria, porque gran porción de la riqueza se habrá consumido o destruido con las huelgas, alborotos y guerras civiles. En cambio, si el orden establecido se conserva y se cuida de que nadie se haga rico burlando el Código Penal, todos trabajarán y se ingeniarán decentemente, por donde crecerán la riqueza y el bienestar; y los ricos serán más ricos y serán más, y los pobres serán menos pobres y menesterosos; y llegará el día, allá en lo por venir, en que los pobres estén mejor tratados que los ricos de ahora. Pero ahora y entonces habrá clases y jerarquías sociales, y será justo que se respeten, porque las hay hasta en el cielo.

Aquí declamó mucho el padre contra el feroz empeño que muestran hoy tantas personas por salir de su clase y elevarse sin mérito suficiente: el tendero, sólo porque se enriquece, pretende ser marqués; el usurero, duque; el sargento, general, sin ir a la guerra, y las mozuelas desvergonzadas, damas y grandes señoras. Contra todos estos abusos disertó con vehemencia, o más bien lanzó centellas y rayos, discurriendo más por extenso sobre el lujo femenino y encareciendo los males que de él proceden.

Me pareció que alguien más se tenía que haber dado cuenta de que esta novela coincide en elementos esenciales de su temática con otra novela realista relativamente próxima en el tiempo: El sombrero de tres picos (1874) de Alarcón y en efecto, así había sido.

Antes de que pasen dos años espero conocer a Pepita Jiménez.


Bélfast: mi edificio favorito

29/03/2015
Belfast

Belfast

Hace unos días, cuando me acordé de Bélfast, menté de pasada el edificio de la TGWU que tiene un mural de baldosas a mi modo de ver fascinante en su relativa fealdad eisensteniana. Por llenarlo de referencias personales diré que tiene también algo de las oficinas de esas fábricas que cerraron en el País Vasco en los años de la reconversión industrial y de aquella en la que el botones Sacarino se la liaba al Dire y al Presi.


Oficios en extinción en la India

07/10/2013
Escribidor callejero

Escribidor callejero (Supranav Dash)

Los cambios en el paisaje laboral no terminan en nuestro mundo occidental. En la propia India también hay oficios que se extinguen, consecuencia del desarrollo económico y la modernidad. Supranav Dash ha hecho una serie de fotos de entre las cuales la que más me ha gustado es la del mecanografista callejero, pero que vale la pena ver en su totalidad.

Nuestra oficina colabora muy estrechamente con otra de la misma compañía multinacional que está en Bangalore (India). Como la empresa la fundaron unos indios de la India en los Estados Unidos, tienen mucho interés en que se hagan muchas cosas en su país de origen. Una de nuestras misiones es tratar de transferir el máximo número posible de funciones a nuestros compañeros de allí, puede que por alguna razón más, pero sobre todo porque ganan menos dinero que nosotros. Es decir, que hacer las cosas en la India es más barato.

La consecuencia es que algunas profesiones desaparecen del mundo desarrollado y se envían a países del mundo en desarrollo como la India. El ejemplo paradigmático es la asistencia técnica en el sector informático, que ha durado unos cuantos años pero que casi se ha unido en Occidente a la lista en la que ya están el cestero, el alpargatero y el afilador.

Diría que en general la sensación que la «deslocalización» de puestos de trabajo produce en la mayor parte del pueblo llano occidental es de relativo malestar. Me llama la atención que lo que no han conseguido las ideologías progresistas para mejorar las condiciones de vida en el tercer mundo lo esté haciendo el libre comercio. Probablemente la agenda del socialismo a escala mundial y la del capitalismo sea la misma. Lo que ocurre es que la mayoría de los izquierdistas son partidarios de la redistribución de riqueza dentro de las fronteras de su país y no más.


Liberty Hall (2)

28/09/2013
Liberty Hall ayer

Liberty Hall, 26-09-2013

La otra vez que escribí sobre Liberty Hall, edificio grandote, me quedé con la idea de que volvería a tratar este edificio, ya que suelo andar por sus alrededores y tengo unas cuantas anécotas relacionadas. Ayer leí que habían decorado la fachada con un cartel de tamaño hermoso, en memoria de la huelga y el cierre patronal de 1913, que están en los prolegómenos del levantamiento de pascua del dieciséis y la posterior independencia y son hitos del movimiento obrero irlandés, cuya trayectoria es relativamente pobre comparada con los de Europa continental.

Esta mañana he visto dos exposiciones de fotografías de hace un siglo, que trataban sobre la mala calidad de la vivienda en el Dublín de las primeras décadas del siglo XX. Viviendas húmedas y en estado de conservación lamentable, tuberculosis por doquier, prostitución, alcoholismo y la mortalidad infantil más elevada de Europa occidental. Hace unas semanas estuve leyendo un libro del que sacaré algún material para comentar aquí, en el que se decía que alrededor de 1880 sólo el 3% de los irlandeses era dueño de su vivienda. De un nivel tan bajo llegó al 84% en los tiempos del tigre y la burbuja. Creo que ni en la España más paupérrima, injusta y desigual el porcentaje de inquilinos se apróximó ni de lejos a este dato tan bárbaro.

De cualquier modo, las ideas de Larkin y Connolly, el socialismo clásico, el sindicalismo y la socialdemocracia después no han tenido demasiado eco en este rincón de la periferia europea, tan apegado al excepcionalismo británico en asuntos de política de clases sociales. Si el imperio británico no hubiese fusilado a Connolly sentado en una silla, esa estación de tren y esas otras cosas dublinesas no llevarían hoy su nombre. Es una hazaña nacionalista la que le ha dado un lugar en la historia.

Hay algunos buenos sitios donde seguir la cronología de 1913. También está el poema de Yeates, septiembre de 2013, cuyos versos trajimos a propósito de la exposición de arte urbano que desapareció de las vallas de ese edificio fantasma e icono de la crisis y que curiosamente ayer reapareció en O’Connell. Aquí unas fotos sobre el tipo de vivienda que padecían las clases populares de esta ciudad a comienzos del siglo XX.


Heroínas de nuestro tiempo

12/02/2013

Todos los días tiene uno un ratillo masoca y más de uno para ver lo que se cuece por España.  Veo que las figuras mediáticas de la semana son, por un lado una Ada Colau, dirigente de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Atentos al nombre que me encanta. No afectados por el huracán ni por el terremoto. No signatarios ni contratantes de hipoteca, no: afectados por la hipoteca. A a un desgraciado le cae un rayo del cielo y a estos les cayó una hipoteca. Así sin comerlo ni beberlo, porque sí. Esta mujer ha ido al Congreso para pedir que quien no pueda pagar la hipoteca, le devuelva la vivienda al banco y santas pascuas. Por otro lado una Beatriz Talegón que le canta las cuarenta a los jefes máximos del presidium supremo de la Internacional Socialista, que yo ni sabía que todavía existía. Les ha dicho que ya está bien de vivir en el puto lujo y gastarse el dinero en hoteles de cinco estrellas y que hay que vivir de acuerdo con los valores socialistas. A buenas horas.

He escuchado ambos discursos y creo que ambas tienen un 20% de razón y un 80% de demagogia. Ada Colau representa en mi opinión el fracaso que son los españoles y Beatriz Talegón el fracaso que es lo que los españoles creen que son o lo que les gustaría ser, según su nivel de percepción de la realidad.

Hace algunos años, tenía unos ahorrillos y me habría gustado comprarme una casa en España. No lo hice porque los precios estaban prohibitivos, pero pongamos por caso que hubiera pujado por la vivienda que compró Ada Colau y que ella, ofreciendo una cantidad mayor se la hubiera acabado llevando. Ahora sería bonito a pagar impuestos para tapar el agujero de los bancos cuando se queden con toda la ruina de las casitas de monopoly de gente como ella. Recuerdo a los nuncabajistas pagando fortunas que no tenían por chamizos y llamándonos agoreros a los descreídos. Cuando planteabas los riesgos, en especial el de devaluación,  te decían que eso era imposible, Uno me llegó a dcir que había tanta gente en la movida que si, eso, al final ya acabaría el gobierno haciendo algo. Parece que yo ya he tenido razón en lo primero y él va a acabar teniéndola en lo segundo.

Soy el primero en criticar a los bancos por sus prácticas inmorales, tipo colocarle preferentes envenenadas de esas a la gente que iba a renovar su depósito, o cobrar intereses de demora absolutamente abusivos y comisiones que no están firmadas en ningún contrato, pero creo que la gente también tendría que ser más responsable de sus actos. Los bancos no son exactamente nadie, pero no veo cómo se puede ayudar a la gente de un país sin rescatar primero a los bancos. Si alguien tiene un dinero en una de las cajas de ahorro que van de pena y encima los temerarios que compraron viviendas en 2006 se las consiguen colocar a la entidad, no sé como al final van a salir billetes en vez de ladrillos de los cajeros automáticos. Me gustaría ver qué ocurriría si un gobierno deja caer un banco y a los impositores les devuelven sólo la cantidad garantizada. Yo trabajé en una financiera que quebró y los dueños, los accionistas, lo perdieron todo. El valor de sus acciones se redujo a cero. Conviene también no confundir el banco con la camarilla que lo dirige en más de una ocasión .En el caso de mi empresa, bastantes de esos se jubilaron con un pastón indecente, después de haberla llevado a la ruina con su codicia. Más sentido tiene que haya un regulador fuerte, control sobre salarios y bonificaciones y sanciones efectivas que las cosas que se están oyendo. Al final, el banco es sólo el dinero de los ahorradores y la irresponsabilidad de algunos la acabarán pagando todos de algún modo. Si en España se implanta la hipoteca «a la yanqui» (si no puedo pagar ahí tienes las llaves) la gente puede irse olvidando del tipo de interés del 2%.  Menos mal que soy peón de obras de las finanzas en el imperio del mal que es esto de la banca. Si me da por progresar en mi empleo me van a satanizar, mientras que un futbolista que gana mil veces más que yo es admirado por la sociedad. También gustaría conocer el universo alternativo en el que a Ada Colau le salieron las cosas bien, y su vivienda se revalorizó un montón y la vendió y ganó un montón de dinero. Querría saber qué estaría diciendo en ese momento de la vida, del sistema económico, de la especulación financiera y de los bancos.

Luego, la otra dama, comentando a los jefes de la socialdemocracia mundial que han abandonado los ideales y tal. Un discurso más viejo que el mismo socialismo y la gente ahora como tiene Facebook se pone boba y dice que eso es verdad y que así se habla. Partiendo de la base de que la Internacional Socialista es tan útil como un congreso ecuménico, la gente va allí reza a sus santos en diferentes lenguas y como no se entienden ni siquiera se enteran de sus diferencias teológicas, pues no sé qué sentido tiene ir allí a decir que tienen que compartir experiencias con los de Uganda. No hay nada que se llame socialismo que sea útil y funcione igual en Suecia y en Tanzania. Pero el socialismo es como el cristianismo, una especie de monopolio de los buenos sentimientos y una continua explotación del sentimiento de culpa. Y vamos a lo del lujo ¿qué pasa con los hoteles de cinco estrellas? ¿es que en ellos no trabaja gente? Como si Ferrari fuera un solo tío y cuando uno se compra un Ferrari todo el dineral fuera para ese. ¿No hay muchos trabajadores en la cadena de montaje del auto, en el hotel de lujo, en el sector entero de la joyería? Si se renuncia al lujo, dejará de existir y se podrá vivir así, pero la sociedad será más pobre. Claro que se puede dormir en sacos de dormir y casas de amigos. Pero también dile a la gente que si vas a Uganda, aunque sea de camping, el billete de avión ya cuesta dos o tres veces el subsidio de 400 euros del que viven algunas familias españolas. Y diles de dónde sale el dinero que lo paga. Lo inmoral no es el lujo, ni que el socialismo no se encuentre a sí mismo. Lo inmoral es que al final ese encuentro no lo ha pagado la gente que se organiza alrededor de esa fe, sino la gente desorganizada que paga impuestos en sus países. Otra cosa que me ha fascinado del discurso es lo de «los jóvenes». Lo mismo que otros se envuelven en la bandera y la patria habla por sus labios, Talegón se arroga la representación de «los jóvenes». ¿Y los jóvenes qué son? ¿Es un tipo de ser humano especial que no pueda participar en las organizaciones en igualdad de condiciones con los más viejos? Me imagino que los partidos han creado sus ramas juveniles para tener una especie de jóvenes florero, como las mujeres florero que hay en otras partes o el negro y el chino florero que ponen los partidos racistas para disimular. Pero si eres un florero y te están regando con ese agua, no sé, no te quejes. O quéjate, que rebelarse vende. Quizá es el tipo de florero que necesita el sistema para legitimarse en este momento.

Y la España del Facebook admirada.